HAMBRE Y FRIO 

31 DIC. 2019

El propósito central de esta reflexión que año con año solía hacer por estas fechas , sigue siendo el mismo a pesar del tiempo transcurrido desde la primera vez que “ECOS” me prestó su espacio, para expresar como tantos otros ciudadanos algunas ideas , pues todo ha cambiado pero nada ha cambiado .

Los años pasan y las instituciones y las personas seguimos evolucionando a veces para bien y a veces no . Lo único que continúa inalterable a través de los siglos es el GRAN MENSAJE que vino a traernos AQUEL que siendo Dios nació en un humilde pesebre destinado a los animales porque los encallecidos corazones de los habitantes de Belén le negaron a su Santísima Madre un pequeño espacio en sus hogares para descansar de su largo viaje .

Ese mensaje que los ángeles se encargaron de pregonar a todos los hombres de buena voluntad en aquella noche bella y misteriosa del nacimiento de Jesús , sigue resonando en nuestros oídos año con año aunque el ajetreo y el bullicio de las compras navideñas impidan que sus ecos lleguen a nuestras conciencias cada vez más adormecidas por el consumismo.

Sin embargo , hoy más que nunca , en que nuestro País se debate entre la incertidumbre y la esperanza pues aún no sabemos que nos depara el futuro , hoy más que nunca , es imperativo que abramos nuestros oídos y nuestros corazones a ese mensaje de PAZ Y AMOR  que vino a traernos el Dios-Niño nacido en Belén , pues EL es nuestra única esperanza ante los embates del crimen y el odio que nos amenazan constantemente . 

Nada ni nadie hará que las cosas cambien en nuestro querido México si no estamos dispuestos a volver a escuchar el DIVINO MENSAJE dentro de nosotros para reencontrar el camino de la paz y la concordia.

No olvidemos nunca que allá afuera de nuestros tibios y acogedores hogares repletos de viandas y regalos , rondan los fantasmas del hambre y la miseria de millones de compatriotas nuestros cuya suerte aún no ha cambiado , a pesar de los discursos oficiales , a los que haríamos felices compartiendo lo mucho o lo poco que la vida nos ha dado .(incluyendo a nuestros hermanos los animales , pues ellos también tienen HAMBRE Y FRIO ).

Atentamente:

Guadalupe Quesada Castillo.