Don Armando saludos extensivos a sus lectores y equipo del ECOS. Solicito publique este escrito para reflexionar sobre la semana intensa e incendiaria. Donde se perdieron terrenos arbolados de años, hoy cenizas, intencionadamente o por accidente en todo México.

 

El fuego aparte de haber hecho perder la flora y la fauna regional, cobró la vida de héroes anónimos que trataron de sofocarlo. Súmele 1) La pandemia que sigue llevándose vidas a todo nivel. 2) Crisis económica 3) Criminalidad creciente, por impunidad de un gobierno más preocupado por cambiar leyes y ganar elecciones, que solucionar problemas relevantes.

 

Había que preguntar al presidente, a los miembros de Morena, incluso los integrantes de esa facción en el grupo parlamentario. ¿Qué significa para ellos, DEMOCRACIA? Porque definitivo, la confunden con demagogia e imposición autoritaria. Y parece que aplican la ley a modo.

A unos meses de votaciones, casualmente cambian la ley de forma expedita para preservar a un cierto juez, que no resuelve y evade asunto específico del INE. Modifica la ley para deshacerse de inversionistas incómodos de CFE y deja pendiente legislación de la mariguana.

Y lo peor, al llegar al poder, han olvidado el objetivo de sus cargos, de SERVICIO PÚBLICO; que son TEMPORALES (asunto que no comprenden dinosaurios y chapulines del poder), pasando por alto que los rige la ley, la cual se la brincan cuando no les favorece y amenazan con destruir instituciones que estorben a sus fines de fraude, no importando la opinión pública.

 

Sino pregúntenle a: Félix Salgado, Mario Delgado, Arturo Monreal y al presidente o a los jueces del tribunal superior de justicia, senadores y diputados, al servicio del mejor postor menos del pueblo como siempre. Sino, ya no habría gente pidiendo limosna, huachicol, narcotráfico, asaltos y desapariciones por el crimen organizado y gubernamental que amenaza con poner impuestos a alimentos y medicinas.

 

Lo peor no es que México esté dividido y confrontado incluso entre familias por defender a una persona que desde presidencia cree ser dueño del país, no empleado de todos los mexicanos. Y lejos de solucionar problemas diversos, agrava las cosas y mal copia gobiernos extranjeros caducos, que apuestan al petróleo, las minas, un “aeropuerto” y tren “falla”, digo maya.

 

Se autoengaña diciendo que pasará a la historia como el mejor presidente, pero no sabe del estrés de millones por la inseguridad que lidian a diario. Y lo más vil, que usa las vacunas para hacer campaña electorera, destinado millones del erario por miles de dosis en ciertas zonas, racionándolas por venganza.

Autoriza pensiones a los de 65 y más, comprando su voto, en lugar de ofrecer empleos e incentivar el mercado. No importando si “ese derecho” lo cobra gente con recursos, porque no le interesa abatir la pobreza real de miles de mexicano que no tienen ni para comer.

Para este régimen todo va bien pues subieron de nivel, los hoy gobernantes, pero hasta cuando les durará el gusto si no incentivan la economía, preservan la paz, el orden y la justicia, sobre todo, si se niega a alternativas para salir adelante. El dichoso pueblo que menciona, solo lo comprenden sus beneficiados y cómplices que hurtan y no transforman las cosas.

 

Culpar a otros en lugar de ponerse a mejorar las condiciones de vida de TODOS los mexicanos, no le permitirá primero, pasar a la historia como el “mejor presidente”, segundo conservar el puesto, tercero, sus secuaces lo traicionarán cuando les llegue el agua al cuello.

 

Es hora que deje de autoengañarse mintiendo. El petróleo para empezar no es de todos los mexicanos, nadie tiene acciones de la paraestatal, ni gozan de utilidades. Sólo él y sus secuaces, como los neoliberales. Y la limosna bimestral que da a viejitos (muertos muchos por COVID), proviene del erario y del lavado de dinero. Bajo régimen absolutista que gasta y no invierte. Que compra voluntades para fabricar esclavos a su servicio. La recopilación de datos, huellas, etc., es para lucrar de impuestos a pobres, que tendrán que pagar tributo por pensión que no servirá con tantos incrementos. ¿O usted qué opina?

 

LIC. JULIETA CAMACHO RIOS.