SOBRAN LIDERES MALOS

Yo no sé si es un fenómeno de reciente aparición, o es algo que la humanidad viene arrastrando desde siempre. Lo cierto es que, en nuestros días proliferan hombres y mujeres que se mueren por ocupar puestos de dirigentes, de guías de lideres. Por otro lado, sufrimos la escasez de buenos dirigentes en todos los ámbitos. Es como si nuestra época se caracterizara por la abundancia de lideres, pero con la carencia de buenos guías. Parece providencial que San Juan en su evangelio ofrezca una constatación: existen malos dirigentes; ladrones y salteadores, imágenes precisas para describir a quienes matan, roban y destruyen al pueblo. También existe el asalariado que, si bien no es tan nefasto como los anteriores, es igual de incoherente que ellos pues trabaja por dinero y es capaz de abandonar a la gente a su suerte, que casi siempre es mala, pues los individuos y los grupos que se aprovechan del pueblo (los lobos) abundan y, además, con mucha facilidad y con mayor cinismo se disfrazan de gente para engañar. Nuestra sociedad, nuestra iglesia y nuestras familias, requieren guías que se asemejen a Jesús el Buen Pastor, pero también son urgentes las personas y las comunidades que sepan distinguir los buenos dirigentes de los ladrones, salteadores y asalariados.

¿Como podemos distinguir a un dirigente malo de un guía bueno ¿Qué podemos hacer para ser buenos guías, pero también para no dejarnos engañar por malos dirigentes?